Lamentable, alguien debe hacer algo
Por Luis Alberto Tamayo
Una vez más las autoridades del Hospital Militar han negado la presencia en ese recinto del General Augusto Pinochet, sus familiares han hecho vigilias, primero en las puertas , desde donde fueron sacados mediante amenazas y golpes por el personal encargado de la custodia del inmueble, y luego en las inmediaciones. Ha trascendido que el general sufrió un paro cardiaco y que no se le habría prestado el auxilio médico correspondiente, pero ninguna atoridad así lo reconoce. Los familiares han recorrido también la Clinica Las Condes y la Clinica Alemana, también el Hospital Clínico de la Universidad Católica , pero en todos se recibe la misma respuesta: el general no se encuentra aquí. En la tarde de ayer su hijo Augusto y su esposa Lucía Hiriart pusieron un recurso de amparo el que fue rechazado por los tribunales. Un vocero allegado a la familia ha reconocido a corresponsales extranjeros que se teme que esta desaparición del general sea para siempre y que ni siquiera tenga una tumba donde sus familiares puedan ponerle una flor. Un rumor ha surgido fuerte y no se sabe el origen del mismo: El general aún vivo, fue amarrado a un riel de ferrocarril preparado especialmente para este efecto y habría sido lanzado desde un helicóptero a varios kilómetros mar adentro frente a las costas de la localidad de San Antonio.